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Una asesoría fiscal y contable en Sabadell nos ayudará a cumplir con todas las obligaciones legales y tributarias que nuestra sociedad debe afrontar. Y si hay un impuesto propio de estas entidades jurídicas ése es justamente el impuesto de sociedades, un gravamen directo que afecta las rentas obtenidas por la compañía durante el año, de la misma forma que hace el IRPF con las personas físicas.
El impuesto de sociedades tiene en la contabilidad de la empresa el pilar sobre el que se estructura. En efecto, el resultado contable es el que determina la base imponible y el importe a pagar. Debemos además tener en cuenta que el impuesto lo pagan tanto las sociedades más habituales como las limitadas y anónimas como también civiles, fundaciones y asociaciones.
En cuanto a los tipos, desde Gabinet J. Creus nos explican que el general, luego de la última reforma, es del 25% sobre los beneficios obtenidos por la empresa. En el caso de las sociedades de reciente creación, la ley establece un incentivo para los emprendedores, estableciendo un tipo reducido de 15% para los dos primeros ejercicios con resultado positivo. Esta deducción solo se aplica a sociedades con actividad económica de manera que quedan fuera de ella las patrimoniales.
Los profesionales de esta asesoría fiscal y contable en Sabadell nos comentan que las rentas de las cooperativas están gravadas con un tipo del 20%, a excepción de los resultados extra-cooperativos que tributan al tipo normal. Además, las asociaciones declaradas de utilidad pública y las fundaciones inscritas en el registro correspondientes tributan con un tipo reducido del 10%
Por último, existe un tipo especial del 1% para sociedades de inversión de capital variable y fondos de inversión financiero e inmobiliario, siempre cuando cuenten con al menos 100 socios.